A falta de pan... "regalos piloto"
A veces me da el punto de regalar. No hablo de grandes cosas, en el sentido material de la palabra. Me refiero cosas de valor subjetivo y de difícil cálculo. Yo los llamo: "regalos piloto".
Puede ser una postal de rastrillo con cinco palabras sueltas o un pensamiento agradable, franqueada a la antigua con sus cuatro días de viaje para recorrer a penas 50 km. Una receta, paso a paso, ilustrada sobre una servilleta que termina en un buzón -no necesariamente conocido-... Pueden ser muchas cosas que solo valen tiempo.
¿El porqué de este pronto?... la mayor parte de las veces el motivo no existe o es incierto... quizá las ganas de compartir, o la necesidad de liberar de ideas esta cabeza tan llena, vaya "usté" a saber...
Pero a veces el porque existe. De repente me acuerdo de alguien y le quiero agradecer, o simplemente decirle "estoy aquí y me acorde que estas allá".
Este fue un "me acordé que estas allá", con un poco de "¿estas comiendo bien?" -esta pregunta es retórica, lo hace y muy bien, me consta- y un mucho de "gracias Hernan por ser tan iluso y tan contagioso"...