Angustia sobre el amor, hacia mí

Ahora mismo me encuentro diferente, vacía, con un presentimiento de fatalidad o inmensidad, con un sentimiento de presión en el pecho, como vértigo, desolación; tal vez tristeza, no lo entiendo.

Me he sentido mejor a meses anteriores, me he esforzado también.

¿Qué siento en realidad?

Es un sentimiento extraño, como si pudiera pasar algo pronto, lo que no sé es distinguir su valor... ¿bueno, malo?

Estoy ansiosa, tal vez sea eso.

Quiero llorar, quiero sentir, quiero amor.

Estos días he estado angustiada, sofocada, cuando leo historias de amor donde el personaje es debotamente fiel a su amor, a sus sentimientos por el otro personaje. Donde se aman, se adoran, se respetan, se perdonan, sufren juntos, se mantienen en la mente del otro, queriéndose a pesar de todo; como si existiera realmente ese sentimiento.

No digo que sea fácil, seguro existen personas que entregan sus corazones y mentes a otra persona, pero entiendo que a mí se me complicaría. He tratado esto en terapia, ¿soy suficiente, soy merecedora de ser amada? La respuesta lógica es sí, soy una chica, tal vez no tan bonita pero sí un poco inteligente, carismática, bromista, empática, a veces valiente y a veces impulsiva; puedo ser una chica atractiva para algunas mentes, sin embargo, ¿yo puedo compartir mi corazón así como yo lo quiero pedir?

Se supone que estoy mejorando y transformando esa parte de mí, en terapia lo hablamos, lo trabajamos, pero hoy... cuando estos días me he sientido normal, estándar, en un plano existencial en el que debo estar o al menos en el que todos están... no sé, lo siento diferente, vacío, como si estuviera perdida.

Hay muchas cosas en mi vida que me gustaría cambiar pero que no dependen de mí directamente porque mi vida está rodeada de personas importantes, y pedir, modificar esas cosas al mi alrededor, es exigir mis deseos sobre los de ellos.

También hay personas que me molestan a mi alrededor y aunque quisiera exigir mis deseos con esas personas, sigue siendo lo mismo, soy egoista y no soy alguien para exigirlo.

Tengo muchos prejuicios dentro de mí, sobre los que me rodean y sobre mí, o como me veo en la sociedad en la que veo, en la que vivo.

Tal vez por eso leo muchos mundos arreglados de mundos ficticios, porque me gustaría hacer eso, arreglar el mío así como las escrituras que leo lo hacen.

Yo... en la ciudad me sentía yo, bella, inteligente, valiente, dueña de mí misma, propietaria de mis deseos, mis fallos y decisiones. Aquí me siento convaleciente, dependiente, aburrida, pobre, fea, insuficiente, desmerecida, con deseos infantiles, sucia, intensa, tonta, desvalorada, incapaz, estúpida, fácil de olvidar, fácil de ofender, insensible, vulnerable, indecisa, sin poder, inmadura, perdida, sin voz.

¿Por qué? ¿No se suponía que estaba mejor? ¿Que me sentía mejor? ¿Que estaba arreglando eso de mí? ¿Mis inseguridades, mis pensamientos caoticos, mis pesares, mis actitudes infantiles y sin importancia?

Quiero que alguien lea esto y me diga que no lo soy, que no soy todo esto, que no me veo como un reflejo podrido y aburrido. Tal vez por eso lo escribo.

Extraño, me extraño.

Soy la primera que debería leerse y decirse que todo eso no es cierto, pero también lo es, es cierto. Puedo ser todo eso y también un poco de lo contrario. Aunque eso no quita lo que me impide ser al completo eso de lo poco que soy.

Es lo que mi mente y corazón no pueden entender.

No me gusta nadie, me llaman la atención algunas personas, pero luego pienso en mi casa, en mi pobreza, en mi fealdad, en mis gustos, en mi inexperiencia, en mi inmadurez, y entonces dejan de interesarme esas personas, me doy cuenta de eso, que no valgo lo suficiente para poder estar a su nivel.

O luego pasa lo contratrio, veo a personas que mi mente cataloga como "no a mi nivel", no puedo estar con ellas.

Y pienso, ¿para qué esforzarse? Mira hacia los lados, enamórate de tus iguales, de tus amigos, de aquellos que ya te conocen y que te entienden de alguna manera, o que al menos ya aceptan estas cosas que les has mostrado.

Tal vez por eso pienso en amigos, los obligo a estar en mi cabeza y yo misma me convenzo de cosas que no son así. Cosas fáciles y al mismo tiempo complicadas.

Soy idealista y busco afecto, ese es mi problema.

El otro día me sentía abrumada, ansiosa, después de leer sobre el amor entre dos personajes. Me dieron ganas de correr, de gritar, de moverme, de huír de mí, de no pensar, de no estar en mi mente, porque veía el amor como quiero verlo conmigo pero que sé que no será.

Yo no quiero casarme, no quiero que un papel obligue a una persona a estar conmigo, ni porque esa sea una manera de sentirse pareja al "completo". Me niego a creer que debe ser así.

Yo quiero compartir mi vida con alguien, sueño con tener un entendimiento real, una deboción mutua, admiración y fidelidad, sin pensamientos religiosos de por medio, sin matices legales que nos representen. Y eso me carcome porque pienso que hay pocas personas que piensen como yo, entonces siento que simplemente estaré sola, en mi vacío y soledad interna, hasta que alguien tenga el valor de pensar o sentir como yo, y yo tenga la suerte de encontrármelo.

Entiendo que esto es solo una etapa dentro de mi progreso, que estar abajo, estar arriba, en realidad eso es vivir... Estar abajo, estar arriba, estar enmedio, sentirnos abajo cuando estamos arriba o viceversa... pero es desagradable ahora mismo, y escribir esto me está haciendo soltar algo, pero me sigue carcomiendo todo, me sigue sofocando este sentimiento de inutilidad, de insatisfacción, de verguenza por ser quien soy y por no llegar a las expectativas de mí misma. No físicamente -aunque también, principalmente con ciertas personas, quiero decir, con quien puedo compararme y verme como basura-, sino de llegar a ser.

Quiero ser alguien, pero ahora mismo no soy ese alguien, y sé que lleva tiempo pero mi esperanza de vida me dice que pronto acabará, que solo estoy aquí por estar y disfrutar mientras estoy, en lo que sea que esté.

No soy la heroína que ojalá pudiera existir, tampoco soy la experta en algo porque nada me interesa lo suficiente para serlo, basándome en el primer pensamiento de estar por estar.

Solo quiero ser mejor y ser mejor, y ya. En lo que sea que haga o se me antoje. En volei, en producción, en escribir, en prestar mis manos y corazón a los perros que lo necesitan...

Sigo queriendo gritar, sacar mi enojo, mi frustración, mi odio hacia mí misma.

¿Así dejaré de sentirlo?

Hoy esos fantasmas están más presentes que ayer. Espero mañana ser más fuerte que ellos.