Lo de Finofilipino me hace pensar que hay gente cansada del feminismo. Yo un poco también. Qué cansado estoy de las feministas. Les das la mano y te arrancan el brazo.
Les das el derecho a voto y crees que van a estar contentas, calladitas y en la cocina haciéndote un sándwich y no, luego resulta que quieren que les paguen lo mismo que a un hombre por hacer el mismo trabajo, que quieren poder acceder a puestos de dirección, que quieren poder andar por la calle sin temer por su integridad física o psicológica, que quieren que su trabajo se vea socialmente reconocido, que quieren poder decidir si quieren tener un hijo o no, poder enfadarse cuando hay algo que está mal sin que la gente diga que es que no follan o que tienen la regla, etc.
Pero vamos, esto sólo las feas, que las mujeres guapas tienen sus ‘superpoderes’ y esas no reclaman esa supuesta igualdad total que las feas dicen no tener. ¿Para qué van a querer que les reconozcan el esfuerzo, un título universitario o su capacidad si pueden enseñar las tetas o ponerse directamente de rodillas y chuparla? Joder, qué suerte. Yo estudiando como un tonto. Ojalá hubiera nacido mujer, que sólo hubiera tenido que convertirme en un objeto sexual para conseguir lo que quiera. Me cachis en la mar salada.
¿SUENO RIDÍCULO, VERDAD? Pues así de ridículo me suena a mí cada vez que leo algunos posts de Fino and co., que de pequeños en el recreo les rechazó una niña porque tenían piojos, hundiendo su ego y provocando que arrastren desde entonces un trauma que esconden con un sentido del humor más que cuestionable y con un alejamiento de la realidad sólo observable en determinadas instituciones para enfermos mentales.