Consejos para organizar tu viaje a Israel

Llegar a Israel es llegar a la Tierra Santa, la Tierra Prometida, un país que te sorprenderá. Recorrer parte del país te resultará como hacer un recorrido por la Biblia, vuelves atrás en el tiempo. La mezcla de culturas y religiones que conviven en este país buscan el camino de convivir pacíficamente. El pequeño estado de Israel es fronterizo al noreste con Siria, al norte con Líbano, al este con Jordania, al suroeste con Egipto y al oeste con el Mar Mediterráneo. Excepto la zona de conflicto de Gaza, las zonas más visitadas del resto de Israel son seguras, de hecho, por las calles de Jerusalem, en Tel Aviv, puedes pasear con total tranquilidad.

Aduana y documentación

Necesitas pasaporte y billete de ida y vuelta. No es necesario que tengas visado en estancias inferiores a 90 días.

Importante:

Te recomendamos ir al aeropuerto al menos con 2 horas y media de antelación, ya que antes de facturar tienes que pasar por un control de seguridad israelí. Te harán un interrogatorio, preguntándote por ejemplo: ¿Ha hecho usted la maleta?, ¿Había alguien con usted cuando la realizó?, ¿Ha traído usted la maleta hasta el aeropuerto?… Si vas con otra persona, suelen contrastar la información que cuenta una persona con la de la otra. A la salida del país te harán pasar las maletas por un escáner antes de llegar al mostrador de facturación y en ocasiones te harán abrir la maleta para revisar el interior.

Diferencia horaria

Depende la época tan sólo hay una hora de diferencia.

Idiomas hablados

El idioma oficial es el hebreo, el 20 % de la población habla árabe y también se habla español (sefardí), yiddish…

Electricidad

220 voltios a 50 Hz, por lo que no necesitarás adaptador.

Moneda y cambio de divisas

La moneda es el Shekel, puedes cambiar de moneda en el hotel aunque nuestra recomendación es que saques dinero con la tarjeta de crédito en los cajeros automáticos. Las casas de cambio, al menos en el aeropuerto, cobran una comisión muy alta.

Transporte

Las distancias desde Tel Aviv no son muy largas, por ejemplo hay 60 kilómetros hasta Jerusalem y tardarás 45 minutos en llegar por carretera. En llegar a Haifa tardarás media hora y hasta Tiberias algo más de una hora. En la ciudad de Jerusalem, no tendrás problema para moverte en transporte público ya que hay autobuses urbanos y un tranvía que ha sido inaugurado en enero de 2012. Los billetes se sacan en las máquinas que se encuentran en las estaciones.

Coche

Si quieres conocer el país, puedes alquilar un coche, ya que las carreteras están muy bien, las señales de tráfico están todas en hebreo e inglés. Para alquilar un vehículo tienes que ser mayor de 21 años y tener un permiso de conducir internacional, con al menos un año de antigüedad, tener una tarjeta de crédito internacional y dejar una cantidad como depósito.

Tren

A pesar de ser reducida su red, existen estaciones de ferrocarril en Acre, Haifa, Tel Aviv, Gaza, Quiriat Gat, Jerusalén, Berseba, Tzefa, Oron… Podrás comprobar que generalmente las estaciones se encuentran en las afueras de la ciudad, sin embargo, es un buen medio de transporte ya que es económico, limpio y la verdad es que es más pintoresco que otros medios. La mayoría de los trenes disponen de vagón-restaurante. Recuerda que el Sabbath (desde el viernes por la noche a la noche del sábado) y los días de fiesta no hay servicio.

Autobús

Es el medio de transporte más utilizado en Israel. La compañía de autobuses Egged es la que cubre la mayor parte del territorio nacional, además de ofrecer el servicio urbano en la mayoría de las poblaciones. La empresa Dan es la que cubre Tel Aviv y sus alrededores. No olvides que el Sabbath (desde el viernes por la noche a la noche del sábado) y los días de fiesta no hay servicio.

Tradiciones

En Israel conviven numerosas creencias, ya que existen más de 15 sectas judías, cristianos, musulmanes o samaritanos. El Sabbath, día de descanso en Israel, comienza con la caída del sol el viernes por la tarde y concluye al anochecer del sábado. Durante este día, todos los comercios judíos, negocios, oficinas e instituciones cierran, al igual que en las fiestas mayores, que también comienzan la tarde anterior y terminan en la noche del día siguiente. Estos días no funciona la mayor parte del transporte público excepto los taxis, y muchos lugares de diversión cierran aunque algunos restaurantes, cines y pubs mantienen sus puertas abiertas. El calendario hebreo, al igual que el musulmán, está basado en el año lunar, por lo que las fiestas judías varían de un año a otro. Para los cristianos el día del señor es el domingo y para los musulmanes el día de descanso es el viernes. Los ortodoxos aunque son minoría en el país (menos de un 10%) tienen mucha fuerza ya que tienen una representación política elevada en el país. Aunque sean pocos, tienen la obligación de votar todos, por ello su representación es tan destacable.

Gastronomía

No existe una comida originaria israelí, debido a la fuerte y diversa inmigración. En general la comida en Israel está sazonada con especias cilantro, laurel, pimienta y como no, con picante. Ten en cuenta que la comida “Kosher”, se sirve en restaurantes en los que se indica junto al nombre del establecimiento. No es una especialidad, sino que son una serie de normas y preceptos judíos a tener en cuenta a la hora de preparar la comida, como por ejemplo si hay carne en el buffet no verás lácteos y a la inversa. De ahí que preparen tartas y postres que normalmente se realizaban con leche con con otro tipo de productos y conseguir un sabor realmente bueno, ya que apenas notarás la diferencia. Otra de las normas que dicta la Torá es que algunos alimentos como el cerdo, los mariscos, el conejo, los crustáceos, los moluscos y las anguilas están prohibidos. Ten en cuenta que en general cuando pides comida en un restaurante la cantidad que te van a servir es exagerada.

La comida más popular que encontrarás es: - Faláfel, una pasta de garbanzos mezclada con hierbas y especies en forma de bolas que se fríen y se ponen dentro del típico pan pita, junto a tiras de col, pimientos y aceitunas, aderezadas con unas cucharadas de salsa de sésamo (tahina) o salsa picante de color rojo (harif) - Humus, es una crema de garbanzos. - Berenjena cocinada de todas las formas posibles. - Pescado San Pedro, lo encontrarás sobre todo en la zona del Mar de Galilea, es un pescado de agua dulce por lo que su sabor es un poco soso, parecido a la trucha. - El pan de pita es el pan típico, es una torta de pan que se prepara con levadura seca, sal, miel y harina de trigo. - Jarlá, es el pan que se consume los días de Shabbath y en las festividades judías, se hace con huevos, ajonjolí, azúcar y aceite vegetal (sin miel) - Knapha, es un postre especialmente rico, un dulce de queso de cabra pero que realmente no tiene sabor fuerte a queso. Un buen lugar para comprarlo es Nazareth. - Dátiles frescos.

Bebidas

El agua en Israel es potable, por lo que puedes beber agua del grifo sin problemas. Cuando pidas agua en un restaurante, a no ser que indiques que quieres que sea mineral, te traerán una jarra del grifo. Encontrarás puestos por todas partes, donde venden deliciosos zumos de frutas. Las marcas más populares de cerveza son Maccabee y Goldstar, mientras que la Nesher es una cerveza de malta.

De compras

Los 3 artículos estrella son diamantes pieles y marroquinería, aunque también suelen ser típicas las compras de recuerdos de carácter religioso, cosmética con propiedades del Mar Muerto, cristalería de Cesarea, corales, artesanía en madera de olivo… Aunque no quieras comprar, es difícil resistirse, al pasar por el bazar más grande de Israel, que es el de la zona antigua de Jerusalem, puedes encontrar de todo, desde artesanía hasta las especias más inimaginables. En Tel Aviv encontrarás las principales tiendas de moda y centros comerciales de prestigio en las calles de Dizengoff. En Jerusalén se concentran en las calles de Ben Yehuda o King David, además fuera de la muralla antigua junto a la puerta de Jafo y torre de David puedes encontrar un centro comercial con todo tipo de comercios modernos, donde parece que no estás en Jerusalem.

Devolución del IVA

Si realizas compras por importe superior a 100 euros puedes solicitar la devolución del IVA (16%) La manera de solicitarlo es solicitar una factura especial en el propio comercio donde pone el sello y entre otras cosas el importe que se ha pagado y lo que corresponde a la devolución. Una vez en el aeropuerto, tienes que ir a un mostrador que indica devolución del VAT, presentarás la factura de compra y normalmente te pedirán que enseñes el producto comprado, tras ello te pondrán un sello. Una vez pases el control y accedas a las puertas de embarque, verás otro puesto “Devolución VAT” y aquí tienes que presentar la factura sellada para que procedan a realizarte la devolución del importe. Esta devolución te la pueden realizar en la moneda que quieras, euros, dólares e incluso Shékels. Ten en cuenta que el importe que te pueden devolver en billetes te lo devolverán en la moneda que quieras, pero el que sea en monedas te lo devolverán en Shékels.

Que llevar en la maleta

Tienes que saber que en Israel sólo tienes invierno y verano. Si viajas en primavera o verano (de aquí) lleva ropa para aguantar el calor, pantalones cortos, vestidos, faldas, camisetas de manga corta… pero recuerda llevar siempre un pantalón largo por si acaso baja la temperatura, sobre todo en la zona de Jerusalem, ya que al estar durante el día a más de 30 grados aunque por la noche no baje excesivamente la temperatura si que se puedes tener sensación de frío. Te recomendamos llevar un pareo o pañuelo para taparte los hombros, ya que en los lugares sagrados de todas las religiones no se puede entrar con los hombros descubiertos, y tanto los hombres como las mujeres no pueden enseñar las piernas por encima de las rodillas. Si viajas en invierno, aunque en general es templado, hay zonas como en Jerusalem que a veces llega a nevar, por lo que la ropa tiene que ser de abrigo, eso si, las temperaturas no bajan nunca de 0 grados. Sin importar la época del año en la que vayas a viajar, lleva siempre un bañador y chancletas, ya que si vas al Mar Muerto, donde nunca hace fino, son imprescindibles. Te recomendamos llevar calzado cómodo, ya que al final pasarás buena parte del día andando.

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